El 70% de las viviendas de alquiler en Toledo supera los 800 euros al mes. En el Polígono, el precio medio es de 750 euros, el más bajo de la ciudad pero aún así alto para familias con sueldos normales. Para abordar esta problemática, la Junta de Comunidades y el Ministerio de Vivienda proponen tres promociones de alquiler a precios asequibles.
Para junio de 2026, se espera que estén disponibles 526 nuevos pisos en tres promociones en este barrio. Estas incluyen 316 en Río Fresnedoso (con un presupuesto de 42.5 millones de euros, con 15.7 millones provenientes de fondos Next Generation), 86 en Río Cabriel (con un presupuesto de 11.4 millones y 4.3 del Next Generation) y 124 en Gregorio Marañón (con una subvención de 6.1 millones).
Estas promociones se orientarán principalmente a jóvenes y familias trabajadoras con dificultades para acceder al mercado de viviendas debido a los altos alquileres. Las viviendas deben ser más económicas que el mercado y dirigidas a trabajadores con ingresos regulares pero con dificultades para alquilar.
El precio máximo en la licitación de las 86 viviendas de Río Cabriel es de 7.8 euros por metro cuadrado de vivienda y 4.68 para garajes y trasteros. Esto significa que una vivienda de 70 metros cuadrados con garaje y trastero puede rondar los 600 euros mensuales. Además, se requiere que las viviendas cumplan con altos estándares de calidad y sostenibilidad.
Es importante destacar que estas promociones no serán viviendas sociales, ya que la demanda actual se centra en viviendas asequibles en lugar de viviendas sociales.
Actualmente, Gicaman está acelerando los procesos de licitación para cumplir con el plazo de construcción para junio de 2026. Esto incluye la relicitación de la promoción en Gregorio Marañón debido a una solicitud de actualización de precios por parte de la constructora.
Estas tres parcelas están subvencionadas por el programa 6 de los fondos europeos Next Generation. El modelo implica una colaboración público-privada donde la administración proporciona el suelo y el sector privado se encarga de la construcción y la gestión del alquiler. Después de 50 años, las viviendas pasarán a ser propiedad pública.
La Junta está consciente de la necesidad de ampliar la oferta de vivienda en Castilla-La Mancha, por lo que ha puesto en marcha el Plan 10.000, que busca construir 10.000 viviendas con la ayuda de fondos propios y de otras instituciones. Además, se ha firmado una estrategia de cooperativas con la Federación de Cooperativas de España para promover la construcción de viviendas a través de la economía social.